Al dejar el coche en la estación de Camorritos vemos dos caminos adentrándose en el monte. El de la izquierda es el que hemos escogido, que nos llevará hacia los llamados miradores de los poetas. Primero hay diez minutos andando entre chalets (o palacios, según el tamaño de algunos) y enseguida te adentras en la naturaleza.
En mitad del camino nos encontramos con este árbol cortado de forma curiosa.
Esto es el Mirador de Luis Rosales. Al llegar arriba se puso a llover muy fuerte, y no pudimos ver la vista que se supone que es espectacular desde aquí, una pena.
Al ir al siguiente mirador (Vicente Aleixandre) nos encontramos con esta pradera nevada. Genial la profundidad de la nieve, pero por otro lado estaba muy nublado y llovía y las fotos no salieron todo lo bien que hubiese querido.
Vista desde el mismo mirador hacia el otro lado de la sierra. Lo dicho, no acompañó el tiempo para las fotos. Ruta genial para conocer parte del valle de la Fuenfría, con una ascensión de una hora con nieve hasta llegar a los miradores.
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